lunes, enero 29, 2007

¿La vida es completamente aburrida?





¿La vida es completamente aburrida?


Paso tras paso veo su composición
intento e intención más huella
e interpretación, puntada de mil hilos
la duración del amor
en su instantánea
el destello fosfórico, luciferino
de la felicidad
las uniones no se ven
no hay recuerdo
solo contradicción
anima los sucesos
las sucesiones
el tiempo que decanta
y el encanto,
decantamiento del encantamiento:
salen los bichitos de luz
y se apagan
pequeños insectos, su visión
es un mundo, tratando de llegar a
advertir, estoy saliendo
dejo mis ojos abiertos
y después los cierro
huelo tu olor bajo las sábanas
es otro mundo, una nuez
representa entonces la carabela
navega el océano
incluye la ternura
de lo que me enseñaron en el colegio
la fotometría, la instantánea
retrato de la familia
luces distraído en el suelo
como si no me estuvieras mirando
pero el movimiento a tu lado
es un maremoto que rompe aquí
esa dirección errática
cuadricula la sala
evade las lámparas
da vuelta los colchones
sacude el polvillo al sol.

Encontré este poema entre mis notas de trabajo del año pasado. Se lo dedico a Cuqui, con quien a veces pienso el aburrimiento, y a Adrián, que vive conmigo. Y pienso, la perseverancia es como un abrir y cerrar de ojos.

viernes, enero 26, 2007

Llego a la plaza

Es una lámina invisible
mas rechaza la luz
y todo lo que aparece
amigable
al acecho.

El túnel es tan largo
me da miedo no saber cuánto tiempo
puedo aguantar sin respirar.

Vértigo del estar cayendo,
pánico de no poder volver.

El recorrido se hace grisáceo en el reojo
comienza el desmayo
me voy quedando inmóvil
estática en un gesto
juntando polvo
sobre la cara.

Y pasan las eras
los años galácticos
permanecer parezco
lenta lenta
aguanto.

De a poco llego a los jardines
preciosos, ocultos jardines
rellanos del túnel
tobogán que se pierde
sigue sin fin.

jueves, enero 25, 2007

la casita de los insectos

siempre mirar qué queda
el rastro, la mancha, la imagen
deductiva de la huella

todo aquello que
debería suceder
no aparece en esa imagen
y el oráculo del pensamiento
está cansado

avanza el monstruo
cada vez más cargado
sin mirarse al espejo
robando, precipitando
un alud
carne o piel
que despelleja
su mismo contorno un manantial
se extingue con furor propio
nadie lo mira
perder su forma
nadie atiende
lo que se sale de lugar
aquella casilla
no puede ser inmensa
y si traspasa la piel
no se nota

lo que crece sin parar
y lo que muere
y lo que es robado y perdido
lo que se deja robar
es un patíbulo privado
un bartulario bajo la alfombra
casita de insectos al azar
que desconocen su planeta

ese calor es lo que llama
la casa del monstruo es otro monstruo
ya parezco llana, humana
deforme y normal

miércoles, enero 24, 2007

Pájaro de lata

Un alud, el día,
violento y rápido
pero sostenido, duradero,
por lo tanto lento,
y detallista, incuestionable.

Se mete en un ataúd.
Angosta los pies
se hace pies
a plena luz del sol
unos pies de nieve.

Riega las plantas, florece
parece salir a pasear
en su atontamiento de hielo congelado
fracasa, se triza
parte de un pie.

Arrasa, y de vez en cuando
se traba
se queda ahí para siempre.

Vuelve a salir
y el frío
es mecánico como una máquina
produce calor de máquina
vuelo de ruiseñor extraviado
pájaro de lata.